La comida basura puede hacer que el control neuronal del apetito se desvanezca
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El estudio es uno de un gran número de estudios que proporcionan evidencia de que demasiada comida basura no sólo tiene un efecto desfavorable en la figura, sino que también daña el cerebro.
Se ha observado, entre otras cosas, que el azúcar puede promover el olvido y que el consumo de demasiados alimentos no saludables puede aumentar la agresividad, la depresión y el estrés, además de provocar la reducción de ciertas áreas del cerebro.
Como informa el equipo de Stevenson, una dieta poco saludable afecta al hipocampo y hace que quieras más, incluso cuando ya estás lleno.
En su estudio, los científicos incluyeron a 105 jóvenes voluntarios sanos que normalmente comían una dieta saludable y los dividieron en dos grupos. Un grupo comió comida chatarra durante ocho días, es decir, alimentos que contenían mucha azúcar y grasas saturadas. Para el desayuno, por ejemplo, había sándwiches tostados y batidos o gofres belgas, y más tarde en el día una comida principal de una cadena de comida rápida. El grupo de control comió sus comidas habituales.
El primer y último día del experimento, a ambos grupos se les ofrecieron diferentes bocadillos poco saludables antes y después del desayuno. Los participantes tenían que indicar cuánto los querían y -después de probarlos- evaluar lo bien que les habían gustado.
El resultado: en el grupo que había estado comiendo gofres, hamburguesas y similares, el autocontrol fue menos pronunciado después de una semana que en el grupo de comparación. El apetito de los participantes por los bocadillos no saludables era mucho mayor, incluso después de haber comido lo suficiente.
Los científicos recomiendan ahora que se investigue más de cerca el papel del hipocampo: Otras investigaciones habrían sugerido que esta región del cerebro es susceptible a influencias ambientales como el insomnio, el estrés, las toxinas ambientales, la depresión y la diabetes de tipo II, factores todos ellos comunes en el mundo occidental. Combinados con una dieta poco saludable, podrían causar no sólo daños agudos sino también a largo plazo y cada vez mayores en el hipocampo.
¿Pero qué pasa si, por el bien del cerebro, no sólo quieres prescindir de la comida basura, sino que quieres promover la concentración y la memoria a través de la dieta? Ya hay varias recomendaciones sobre esta cuestión. Por ejemplo, los carbohidratos complejos de cadena larga, como los que contienen los productos de grano entero, ayudan a satisfacer las necesidades de energía del cerebro de manera uniforme y, por lo tanto, a mejorar la concentración.
Se dice que los ácidos grasos omega-3 procedentes de pescado, nueces, colza y aceite de nuez con alto contenido de grasa tienen un efecto beneficioso sobre las células nerviosas y su interacción; las proteínas de pescado, marisco, productos lácteos magros, legumbres y granos enteros también se consideran beneficiosos.
Nota: Este artículo ha sido traducido utilizando un sistema informático sin intervención humana. LUMITOS ofrece estas traducciones automáticas para presentar una gama más amplia de noticias de actualidad. Como este artículo ha sido traducido con traducción automática, es posible que contenga errores de vocabulario, sintaxis o gramática. El artículo original en Alemán se puede encontrar aquí.