Suministro de leche no recomendada a los niños pequeños
Photo by Nikolai Chernichenko on Unsplash
Para evaluar la prevalencia de servir bebidas lácteas no recomendadas (es decir, leche para niños pequeños y leche vegetal) en lugar y además de los productos lácteos recomendados (incluidas las fórmulas infantiles preparadas comercialmente y la leche de vaca) a los bebés (de 6 a 11 meses), a los bebés en transición (12 meses) y a los niños pequeños (de 13 a 36 meses), los investigadores encuestaron a los cuidadores principales estadounidenses de bebés, bebés en transición y niños pequeños.
"Exploramos el suministro de productos lácteos recomendados y no recomendados a los lactantes y niños pequeños, por lo que examinamos las fórmulas para lactantes, las leches para niños pequeños, las leches de vaca y las leches no lácteas. También queríamos encontrar cualquier factor sociodemográfico que pudiera estar relacionado con los tipos de leche ofrecidos por los cuidadores de diversos orígenes", dijo María J. Romo-Palafox, doctora en nutrición y dietética, del Departamento de Ciencias de la Salud de la Facultad de Doisy, Universidad de Saint Louis, MO, EE.UU.
Aproximadamente dos tercios de los cuidadores declararon que servían los tipos de leche que los expertos recomiendan para sus bebés o niños pequeños, incluyendo la lactancia materna y/o sirviendo fórmula infantil preparada comercialmente sin ningún otro tipo de leche a los bebés y sirviendo leche de vaca a los niños pequeños. Sin embargo, más de un tercio de los cuidadores de bebés encuestados afirmaron haber servido al menos un tipo de leche no recomendada a su bebé en el último mes, incluida la leche para niños pequeños y/o la leche de vaca, y la mayoría afirmó haberla suministrado a diario. Además, la mayoría de los cuidadores de niños pequeños no siguieron las recomendaciones de los expertos de dar sólo leche de vaca a sus hijos y tendieron a dar tipos de leche no recomendados -fórmula para lactantes con mayor frecuencia, seguida de leche para niños pequeños y leche vegetal- además de los tipos de leche recomendados.
Los investigadores descubrieron que factores como la edad del niño, los ingresos de la familia, el origen racial y étnico del cuidador y los reclamos de marketing del producto se asociaban con el tipo de leche que recibían los niños, lo que sugiere que se necesita más investigación para entender cómo las diversas poblaciones interpretan los reclamos del producto y cómo el marketing puede perpetuar las disparidades de salud.
"Es importante señalar que las fórmulas infantiles no son intrínsecamente malas. Nos alegramos de que este producto exista para las madres que no pueden dar el pecho. Pero el público debe tener toda la información para poder tomar una decisión informada sobre lo que es mejor para su bebé", explicó la Dra. Romo-Palafox. Los resultados de este estudio indican una oportunidad para realizar campañas de educación en salud pública, divulgación en la comunidad y orientación adicional por parte de los proveedores de atención médica, especialmente en lo que respecta a las posibles deficiencias de nutrientes, deshidratación y desnutrición cuando se proporciona leche de vaca o leche vegetal a los bebés y se sustituye la leche materna (o la fórmula infantil preparada comercialmente).
Nota: Este artículo ha sido traducido utilizando un sistema informático sin intervención humana. LUMITOS ofrece estas traducciones automáticas para presentar una gama más amplia de noticias de actualidad. Como este artículo ha sido traducido con traducción automática, es posible que contenga errores de vocabulario, sintaxis o gramática. El artículo original en Inglés se puede encontrar aquí.