Cómo el crecimiento de la población determinará el futuro de la industria alimentaria
Sesotec GmbH
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) estima que 9.700 millones de personas habitarán este planeta en 30 años. Este rápido crecimiento de la población cambiará muchos aspectos de nuestras vidas en este planeta: En particular, la forma en que vivimos, trabajamos y comemos.
La Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación predice que la producción mundial de alimentos debe aumentar por lo menos en un 70 por ciento. De lo contrario, no se garantizaría una nutrición adecuada de la población mundial en 2050. Otro desafío importante es cómo conciliar la menor disponibilidad de recursos con las crecientes expectativas de los consumidores.
El hecho es que para que los alimentos sigan siendo seguros, saludables, asequibles y abundantes en el futuro, la producción industrial de alimentos debe basarse en soluciones innovadoras.
Producción de alimentos y crecimiento demográfico: pasado, presente y futuro
En consonancia con el crecimiento de la población mundial y el aumento de la prosperidad, las oportunidades para la producción industrial de alimentos han aumentado constantemente durante el último siglo. Los ingresos de los hogares y el nivel de vida han aumentado y los productores de alimentos siempre han podido satisfacer la creciente demanda de alimentos de alta calidad mediante innovaciones técnicas.
Los avances tecnológicos en la producción de alimentos han permitido producir una mayor cantidad de alimentos seguros y nutritivos. Esto es notable en el sentido de que la superficie disponible para el desarrollo agrícola e industrial ha disminuido.
La diversidad de alimentos de hoy en día no tiene precedentes en la historia de la humanidad. Esto es particularmente cierto para las naciones industrializadas: En Alemania, por ejemplo, el cliente medio puede elegir entre más de 170.000 alimentos diferentes cada día (BVE, "Alemania - Socio del Mundo 2018", pág. 28).
Sin embargo, en vista de los cambios demográficos y ecológicos que se están produciendo, la producción industrial de alimentos tendrá grandes dificultades para mantener los altos niveles actuales de calidad y disponibilidad hasta 2050. Además, el desarrollo de la población mundial está ejerciendo una presión considerable sobre los recursos naturales que son indispensables para el buen funcionamiento de la producción de alimentos. Por lo tanto, es necesario desarrollar continuamente las soluciones tecnológicas existentes para hacer frente a los desafíos futuros y poder garantizar el suministro de alimentos en el futuro mediante un suministro de alimentos que funcione.
Aumentar la producción de alimentos a pesar de los recursos limitados
En diversas esferas de la producción industrial de alimentos, la automatización de los procesos ya está contribuyendo a importantes mejoras en la eficiencia y la sostenibilidad. Agricultura, procesamiento, envasado: Los sistemas inteligentes ya procesan enormes cantidades de datos en tiempo real para aprovechar mejor los recursos disponibles y lograr resultados óptimos.
Al mismo tiempo, el aumento del volumen de producción requiere controles más estrictos de la seguridad alimentaria y la calidad de los productos. La solución incluye tecnologías de inspección automatizada, ya que permiten aumentar los volúmenes de producción sin comprometer la seguridad y la calidad de los alimentos. Ya sean detectores de metales, sensores ópticos o rayos X: Los sistemas de inspección innovadores pueden ser programados con información del producto y condiciones de procesamiento específicas para trabajar con alta precisión.
Al instalar estos sofisticados y automatizados dispositivos de inspección en puntos importantes y críticos del proceso de producción, la contaminación y los defectos pueden ser identificados y eliminados de manera fiable. La detección temprana de los contaminantes también reduce las pérdidas de alimentos causadas por la retirada de productos y la contaminación cruzada.
El crecimiento de la población mundial y el mayor compromiso con la seguridad alimentaria
El comercio mundial aumentará a medida que crezca la población mundial, según el pronóstico. Sin embargo, esto también significa que los alimentos contaminados que entran en el mercado pueden tener consecuencias de gran alcance para la salud pública. Además, la confianza en las empresas que han puesto en el mercado alimentos contaminados podría disminuir considerablemente.
Por consiguiente, los fabricantes de alimentos deben comprobar la integridad de sus socios en las fases iniciales y finales del proceso en lo que respecta al cumplimiento de las normas de seguridad alimentaria.
Las modernas tecnologías de inspección juegan un papel clave aquí. Ayudan a los fabricantes y a las autoridades de control internacional a rastrear los contaminantes directamente hasta su fuente. En este sentido, contribuyen a una mayor transparencia en la industria alimentaria y cumplen con el deber de informar al público.
La cultura de consumo en un mundo con 9.700 millones de personas
Avances tecnológicos como estos son necesarios para alimentar a la población mundial en 2050. Pero no es sólo la cantidad de alimentos que debe ser suministrada, sino que también deben cumplirse las expectativas individuales de los consumidores. En 2050, la población mundial no sólo será más multicultural que nunca, sino que también participará en gran medida en las importantes cuestiones de la salud, la ética y la sostenibilidad.
La migración y los cambios demográficos provocan el crecimiento de las zonas urbanas y una mayor diversidad. El multiculturalismo emergente en muchas ciudades de todo el mundo está creando nuevos retos, pero también nuevos mercados para los alimentos del futuro. A fin de satisfacer las necesidades de una población creciente con diversas preferencias nutricionales, la industria alimentaria debe adaptar sus procesos de producción. Es necesario ampliar la cartera de productos, por ejemplo, para satisfacer los diferentes gustos y normas religiosas, incluso en mercados antes homogéneos.
Además, vivir en un mundo de 9.700 millones de personas conducirá inevitablemente a un cambio en los patrones de pensamiento: Las personas se volverán más críticas con las cuestiones de los recursos, la salud y el consumo. Ya se observa un cambio en la actitud de los consumidores: las encuestas de la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (efsa) muestran que la mayoría de los europeos (55 por ciento) tienen una gran conciencia de cuestiones como la salud, el medio ambiente y la inocuidad de los alimentos. Como resultado, dos tercios de ellos incluso han cambiado su comportamiento como consumidores.
Conclusión
El crecimiento de la población mundial traerá cambios: para las cadenas de suministro mundiales, la economía internacional y la cultura alimentaria mundial. Por un lado, es necesario aumentar la producción de alimentos para evitar la escasez de éstos. Por otra parte, la industria alimentaria debe ser capaz de satisfacer en todo momento las exigencias de una cultura de consumo dinámica, sin perder de vista el bienestar de la salud pública y el medio ambiente. Esto requiere tecnologías y controles innovadores en todos los sectores de la producción industrial de alimentos. Para la comida del futuro, cualquier progreso es crucial.
Nota: Este artículo ha sido traducido utilizando un sistema informático sin intervención humana. LUMITOS ofrece estas traducciones automáticas para presentar una gama más amplia de noticias de actualidad. Como este artículo ha sido traducido con traducción automática, es posible que contenga errores de vocabulario, sintaxis o gramática. El artículo original en Alemán se puede encontrar aquí.