La imagen de la carne se recupera
Un cambio positivo de percepción
Vion Group
Así lo demuestra la edición de este año del Vion Consumer Monitor: La imagen de la carne se recupera lentamente. Según la encuesta a consumidores representativos de Vion Food Group realizada por Consumer Panel Services GfK, el 61% de los encuestados está de acuerdo con la afirmación "la carne es un componente indispensable de la dieta". Se trata de un notable aumento de 4 puntos porcentuales con respecto a la encuesta especializada sobre inflación de otoño de 2022 y del primer repunte desde 2019 (63 por ciento). Un examen más detallado de los datos sociodemográficos revela - el renovado aumento del acuerdo con esta afirmación en comparación con 2022 es particularmente pronunciado entre las familias jóvenes o parejas sin hijos, así como entre las familias jóvenes con niños pequeños. Además, casi la mitad de la generación más joven, asociada a Fridays-for-Future, reconoce un valor añadido en el consumo de este producto natural rico en proteínas: El 46% de los menores de 34 años está de acuerdo con la afirmación "la carne es sana". En la última encuesta periódica, eran el 38,2 por ciento. De media, el 53,0 por ciento apoya esta afirmación (2022: 51,3 por ciento). La reputación de los alimentos de origen animal parece abandonar la tendencia a la baja.
La regionalidad y la transparencia se mantienen, las etiquetas pierden relevancia
Las tendencias clave predominantes de regionalidad y transparencia siguen ejerciendo su influencia: cuando tienen la posibilidad de elegir, tres cuartas partes de los consumidores de carne encuestados prefieren la carne de origen local (frente al 78 por ciento en 2022) y el 60 por ciento destaca la importancia de la transparencia de los orígenes (frente al 65 por ciento en 2022). El bienestar animal (64%, frente al 69% en 2022) y la sostenibilidad (65%, frente al 71% en 2022) siguen siendo un factor de compra importante para más de la mitad de los compradores de carne encuestados. A pesar de estas preferencias, la importancia de las etiquetas de certificación está disminuyendo. Este año, solo el 54 por ciento estaba de acuerdo con la afirmación de que las etiquetas que aportan valor añadido (por ejemplo, regional, no transgénico, ecológico) son importantes para ellos a la hora de comprar carne. El año anterior, el porcentaje seguía siendo del 59%. Cabe destacar que siguen orientando a las familias/parejas jóvenes sin hijos (62 por ciento) y a las familias jóvenes con niños pequeños (65 por ciento).
Sí a la sostenibilidad, pero no a los aspectos individuales
La sostenibilidad es y sigue siendo un tema importante a la hora de comprar carne. Sin embargo, hay diferencias de importancia entre los aspectos individuales de la sostenibilidad. Aunque más del 65 por ciento afirma que compraría carne de producción sostenible si pudiera elegir, alrededor del 60 por ciento no necesita más información sobre la huella de CO2 en este momento. Sin embargo, en lo que respecta al ámbito de responsabilidad de la reestructuración de la industria cárnica alemana, como medidas para un mayor bienestar animal, número de animales por granja, etc., los encuestados coinciden en casi un 60 por ciento: ésta es tarea de la política. El 43 por ciento afirma incluso conocer planes políticos concretos, como los relativos al etiquetado de la cría de animales.
Se busca: Carne fresca asequible y de alta calidad
A la hora de comprar carne, la calidad y la frescura tienen que ser correctas. Los consumidores consideran que estos dos factores son los más importantes a la hora de comprar. En consecuencia, se busca un equilibrio favorable entre coste y valor. Un buen trozo de carne también puede ser más caro, como confirma el 70% de los encuestados. En el contexto de la inflación y la escalada de precios, menos consumidores consideran que la carne de los supermercados (29%) y las tiendas de descuento (38%) sea excesivamente barata. Esto contrasta con la encuesta específica sobre la inflación realizada el pasado otoño, en la que las cifras se situaban en el 31% (supermercados) y el 41% (tiendas de descuento) entre los encuestados que reconocían el bajo precio de la carne. Sin embargo, sólo el 8% de los encuestados cree que los niveles de calidad de los grandes mataderos son superiores a los de las instalaciones más pequeñas.
"Esta valoración nos parece bastante sorprendente. Sobre todo los grandes mataderos están sometidos a los controles más estrictos y a certificaciones independientes, y establecen normas de calidad para toda la industria cárnica. Parece existir una notable necesidad de aclaración a este respecto", comenta Willhelm Habres, Director de Ventas, Comercio y Marketing de Carne de Vacuno de Vion, responsable desde hace muchos años del Vion Consumer Monitor (VCM) de la empresa.
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